La audiencia imputativa se realizó en la mañana de hoy. En tanto el oficial que dejó el patrullero en marcha afrontará un sumario a nivel policial.

El hecho ocurrió durante la madrugada de este domingo, cuando el ladrón de 31 años -que estaba en estado de ebriedad- aprovechó un descuido de los agentes que habían bajado del auto para ingresar a la comisaría y atender a dos mujeres que necesitaban hacer un llamado telefónico.

El hombre se subió al vehículo y aceleró, dejando atrás a los policías sorprendidos. La persecución se extendió por varios kilómetros, hasta que finalmente el fugitivo fue interceptado y detenido en Piamonte, a unos 30 kilómetros del lugar del robo.

El sujeto aprovechó el descuido de los policías, se subió al auto oficial, un Fiat Cronos que fue entregado hace poco tiempo a la fuerza de esa localidad. Allí comenzó la búsqueda que terminó con el hallazgo del vehículo en el pueblo vecino y el protagonista detenido.